Manuel Baigorria, se inició muy jovencito en el servicio militar voluntario, en la época en que gobernaba la provincia de Buenos Aires el Brigadier General don Juan Manuel de Rosas, el líder de la divisa punzó del federalismo, combatido ferozmente por los unitarios librecambistas.
Baigorria había actuado al mando del General unitario José María Paz. “El manco” Paz cayó en desgracia y para evitar ser atrapado, Baigorria se interna en los extensos bosques de caldén al sur de la provincia de San Luis.
Enfiló hacia los toldos de los ranqueles y allí se puso a convivir con ellos, como uno más, en la zona de la laguna de Trenel. En varias ocasiones salió a maloquear (andar en malón) con los indígenas como un lancero más de la tribu, pero armado con revólver y fusil. Fue en esa convivencia cultural, que apadrinó a un hijo de la tribu de los Huala (dinastía de los Patos) el año 1837, a quien se le impuso el nombre de Manuel Baigorrita, el nombre del padrino y el diminutivo de su apellido.
Manuel Baigorrita fue visitado en los toldos de su tribu, en la zona del Quenque al sur de poitahué, (divisadero, lugar para divisar) cuando el año 1870 llegó a los dominios de Mariano Rosas en Leuvucó, el Coronel Lucio V. Mansilla con una escolta militar de cuatro oficiales, once soldados, un baqueano, una mujer india lenguaráz (la “china” Carmen) y dos curas franciscanos (Donatti y Álvarez) de Río Cuarto (Córdoba).
Manuel tenía un hermano menor, bautizado como Luis Baigorrita. Este cayó preso de los militares cuando se llevó a cabo la operación de la batida contra los toldos el año 1879, en la operación de limpieza final de la mal denominada “conquista del desierto”. Fue confinado con su familia a la Isla Martín García. El año 1881 le conceden la libertad, estableciéndose con su gente en el Partido de General Viamonte, de la provincia de Buenos Aires. Allí hay un pueblo llamado Baigorrita, en homenaje al hermano mayor precisamente.
Cuando se lleva a cabo el segundo Censo Nacional de Población el año 1895, se incluyó a los indígenas que vivían en el entonces Territorio Nacional de la Pampa Central. Luis Baigorrita declaró al censista ser soltero, haber nacido en el Territorio de la Pampa Central, tener 45 años de edad en ese momento y ser de oficio jornalero, es decir trabajaba (por día) de changas en distintas tareas de campo.
Luis Baigorrita, apodado “Lucho”, había nacido hacia el año 1850 en el paraje Poitahue (actual departamento Loventué, jurisdicción de Carro Quemado). Era hijo del cacique chileno Pichuiñ y como se ha dicho, hermano del cacique Manuel, muerto en la zona de Neuquén en 1879 en ocasión de ser perseguido por una columna militar. No se quiso entregar como otros y prefirió morir peleando allí en Auca Mahuida.
Una hija de Luis Baigorrita y Juana Galván, nacida el 1º de septiembre de 1895, fue bautizada con el nombre de Marcelina. Su familia y ella, siendo una niña, volvieron lentamente hacia la Pampa Central, primero estuvieron viviendo en la zona de Trenque Lauquen, (Buenos Aires) desde donde “migraban estacionalmente a los campos del Territorio Nacional, donde se conchababan como peones”.
Hacia mediados de la década del año 1890 el cacique con parte de su familia se asentó al sur del Departamento Chalileo de la Pampa Central en el lote 21. Primero había obtenido la entrega del lote 13, fracción D, de la Sección XIV al suroeste del Departamento Utracán y luego solicitó el cambio de radicación al lote 21, contiguo al de la colonia Emilio Mitre.
Según los informes de los Inspectores de Tierras Fiscales, la Dirección Nacional que dirigía esa oficina, en dicha zona vivían también los caciques José Gregorio Yancamil y José Fraga. Yancamil había enfrentado, en el último combate un 19 de agosto del año 1882, a los soldados que lo perseguían, en la zona del cerro Cochicó, Departamento Puelén.
Fue en la comunidad de don Luis Baigorrita donde se realizó la visita de Viviana García, la gran Machi de los Catriel, adonde habría llegado invitada para participar en el último nguillatun alrededor del año 1910. Según se dice, Viviana habría fallecido en ocasión de emprender el viaje de regreso al Azul, lugar de su residencia, en la provincia de Buenos Aires.
El año 1914 el maestro español Manuel Lorenzo Jarrín describe la vestimenta del Cacique Baigorrita en éstos términos: “viste saco y bombacha de color oscuro, un pañuelo de seda blanco con lazo, al cuello, zapatillas de color, chambergo negro”.
De las anotaciones en sus cuadernos, el maestro de la escuela Nº 58 de la Colonia Emilio Mitre, donde dejó constancias de sus actividades y novedades diarias extraemos estas noticias: “Dionicio…me anuncia que para el 16 (enero 1914) de febrero prepara el cacique Baigorrita una fiesta tradicional indígena que se denomina américún en lenguaje ranquelino”.
Jarrín describe posteriormente a Yancamil: “es este indígena, alto de talla, cuerpo más bien corpulento, tes oscura, ojos regulares muy vivos, barba y bigote blanco poblados, la barba larga redonda, viste saco y bombachas de color negro, pañuelo de cuello, zapatillas de color, tiene 77 años, habla con calma y muy claro…”(9 de febrero de 1914)
En otra cita de sus memorias Jarrín anota: “a las 6 vino el cacique Baigorrita, con el hijo Juan de 12 años, que trae a lo de Morales para que asista a la escuela, vive Baigorrita en la Colonia “La Indiana”, lote 21 de la Secc. VIII letra… lindando al sur con la Colonia Mitre, a 9 leguas de la escuela, es de talla regular, corpulento, ancho de hombros, presenta el verdadero tipo napolitano aunque es indígena puro, de color trigueño claro, completamente calva la parte superior de la cabeza y muy pocos pelos canos en el resto, bigote espeso, largo, completamente blanco, caídas las dos puntas hacia abajo a los dos lados de la boca, cara afeitada, …es afectuoso al hablar aunque habla poco, prestando mucha atención cuando se le habla, según creo porque no habla bien el castellano”. (6 de marzo de 1914)
El Morales que menciona el maestro en el párrafo anterior, es don Santos Morales, el lugarteniente de Yancamil, quien vivió también sus últimos años con su familia en la Colonia “Emilio Mitre”.
Marcelina trabajó como empleada de servicio doméstico en algunas estancias de la zona. En esa tarea le tocaba lavar “la mugre de los demás”, oficiar de ayudante de cocina, ordeñar vacas, desvicerar los animales recien carneados, sacar la ceniza y los restos de brasas viejas de la cocina o fogones. Traer agua desde los pozos o jahueles, atender el gallinero y también los perros y gatos. Cuando llegó el Centenario de Victorica un periodista le toma la foto que adjuntamos y le hace algunas preguntas.
El Concejo Deliberante de la Municipalidad de Victorica, dictó la resolución Nº 9 del año 1994, mediante la cual se le impuso al Hogar de Ancianos de esa localidad el nombre “Marcelina Baigorrita”, quien vivió en dicha institución sus últimos años, alcanzando a cumplir los 97 de edad al momento de su fallecimiento, ocurrido el 9 de marzo de 1992.
Bibliografía consultada
1.- Valle, Celso “José Durando. El Apóstol del Oeste”, editado 1972
2.- Salomón Tarquini, Claudia y Lanzillota, María de los Ángeles “Un Quijote en La Pampa” FEP Colección 2011