Cuando en enero de 1970 abrí mi oficina de Contador Público, frente a la plaza de Victorica y esperaba que aparecieran los potenciales clientes, tenía tiempo para ir, después de almorzar, al Club Social.
Ahí lo conocí a este español compartiendo con sus amigos el café y jugando a la generala. Cuando era la hora de abrir la carpintería que tenía enfrente del costado del colegio María Auxiliadora, él salía caminando rumbo al taller.
Al año siguiente me vino a ver para que le atendiera su carpeta impositiva provincial y nacional, así que nos hicimos amigos. Después que me casé y nos instalamos con mi esposa nos hizo varios trabajos en la casa nueva, todavía conservamos algún mueble, así que estrechamos los vínculos.
El año 1972 cuando fundamos el Club de Leones, filial Victorica, lo invité a formar parte, lo que gustosamente aceptó. Era un hombre trabajador, dinámico, alegre y sobre todo solidario. Fue por eso que formó parte de la Cooperativa de Electricidad, integró la comisión del Club Cochicó, el que llegó a presidir.
Oscar Costantino lo recuerda con mucho cariño, porque él fue el que llevó al Club Cochicó a integrar la Liga Cultural y acompañaba al equipo en todos los partidos en cualquier lugar que se jugara.
Se casó con Hortencia Beviglia, la hija menor de la familia que tenía una tienda frente al costado de la escuela N°7. El “gallego” Dominguín como le decían los amigos además de ser alegre, dicharachero y solidario, tenía un olfato especial para los negocios. Con Hortencia pusieron el servicio de telefonía e internet, antes que aparecieran los celulares que hoy están popularizados.
Compró un terreno a media cuadra de la municipalidad, frente a la casa de la familia de Alfredo Gesualdi y allí comenzó a construir un edificio para montar un cine. Es que el antiguo cine “Armonía” estaba cerrado y el del colegio “Don Bosco” era una sala con butacas de madera muy incómodas y tenía escalera para acceder. Hizo todas las butacas en su carpintería y todas las instalaciones que fueran de madera. La sala tiene la pendiente apropiada para que ningún espectador se vea imposibilitado de ver, como sucedía en las dos salas mencionadas anteriormente, en las que cuando se sentaba una persona de estatura alta había que cambiarse de butaca. La sala además tenía boca de teatro para espectáculos, así que además de la proyección de películas allí se presentaron para Victorica y la zona varios espectáculos.
La bautizó nostalgiosamente “Cine Granada”, por ser la región de donde procedía.
Cuando llegó el momento de la inauguración nos sorprendió a todos, porque aparecieron los afiches de gran tamaño a todo color a principios del mes de agosto del año 1979. Allí se anunciaba que para dicho acontecimiento estaría presente nada menos que el cantante español Julio Iglesias, momento de pleno auge.
Ese día la sala se colmó y hubo gente que no consiguió lugar, vino gente de otros lugares de La Pampa. Edgardo Perez Morán, hijo de Lázaro Pérez recuerda que cuando el artista llegó a Victorica, pasaron por la casa de fotografía para sacar algunas fotos.
Domingo estaba felíz y muy contento de haber hecho realidad uno de sus sueños. El cantante había traído su orquesta y lo acompañaban las trillizas. Fue un espectáculo que los que asistimos no nos olvidaremos jamás. Toda la recaudación fue donada para el Comedor Escolar Municipal, una de las instituciones del pueblo más necesitada de cooperación.
Su carpintería fue una escuela para varios jovenes, que trabajaron con él Policastro, Peracca, Urquiza, Carripí, Fernández, Figueroa y algún otro que mi memoria no registra.
Después armó una sociedad con Jacobo Niemeyer de la estancia “Las Vertientes” y pusieron un feed lot que llamaron “El Romaneo” a la vera de la ruta provincial 10 entre Loventuel y Victorica.
PD
Julio Iglesias: “En 1977, batió la marca de asistencia en Chile, donde más de 100 000 personas asisten a su concierto en el Estadio Nacional en Santiago. En el verano de 1977 el cantante alcanza la cifra de 35 millones de discos vendidos en todo el mundo, y su álbum El amor alcanza las primeras posiciones en 44 países”. (Fuente: Wikipedia)